¡Hola de nuevo!
Hoy os vamos hablar un poquito sobre un tema que interesa especialmente a las chicas que os encontráis ahora mismo en Estados Unidos y que pondrá los dientes largos a aquellas que todavía os estáis pensando en si lanzaros a la piscina o no. Estoy segura de que después de leer este artículo, a muchas de vosotras os picará el guisanillo norteamericano y decidiréis dar el paso; porque, al fin y al cabo, vamos a hablar de lo que más nos gusta a todos: las vacaciones.
Como muchas de vosotras sabéis, el programa de au pair en Estados Unidos tiene una duración de 12 meses pero, una vez hayáis acabado vuestro contrato, tenéis un mes más (el mes número 13) en el que seguiréis teniendo vuestro visado en regla pero no tendréis que trabajar. ¿Que para qué se usa ese mes? Efectivamente, lo habéis adivinado: para viajar por todo Estados Unidos.
Lo normal es ahorrar un poquito cada mes durante todo el año para luego poder daros un buen homenaje con los amigos que hayáis hecho durante vuestra estancia. La gente normalmente viaja a la otra costa de donde han estado; alquilan un coche… ¡y a explorar! La ruta 66, Las Vegas, Miami, Nueva York, Chicago, California… ¡las opciones son muchas y dependen de vosotras y de vuestro presupuesto!
Hoy os vamos a contar el caso de Judit, nuestra au pair que ha estado un año viviendo en Colorado y que ya ha vuelto a su Vic natal.
Judit no tenía muy claro qué iba a hacer durante su mes 13 (de hecho, ni tan siquiera sabía si lo aprovecharía o se volvería directamente a casa) pero tuvo que tomar la decisión bastante antes de que acabase su año. La organización americana con la que os vayáis se pondrá en contacto con vosotras un par o tres meses antes de la finalización de vuestro programa para preguntaros cuándo y desde dónde os tiene que comprar el vuelo de vuelta (recordad que esos vuelos ya están pagados y es la agencia norteamericana quien se encarga de su gestión, igual que hicieron en la ida). Es importante también que sepáis que podéis pedir la vuelta desde cualquier punto de Estados Unidos, no necesariamente desde donde habéis estado viviendo los últimos 12 meses.
Bueno, tal y como iba diciendo, los primeros días de vacaciones los pasó en su casa de Colorado acompañada de una au pair española que había conocido en el training en Washington DC y con la que había estado en contacto durante todo el año a pesar de que ésta vivía en Maryland. ¿Veis como es cierto cuando os decimos que en el training se conoce a mucha gente que probablemente os acompañe en la distancia durante todo el año? Y después se fueron todos juntos a un campamento en las Rocky Mountains donde cada familia tenía la típica casa hecha con troncos que veis en las películas de campamentos. Sí, como en el campamento de “Tú a Londres y yo a California” (por anteriores entradas al blog, ya sabéis que me encanta esa película). Allí hicieron actividades organizadas tales como montar a caballo, disparar con rifles en un campo de tiro (de balines, por supuesto, no nos vayáis a dar un disgusto), tiro con arco, tirolina, excursiones de noche, juegos de lo que se conoce como family building. Y, como deduciréis ya, se lo pasaron en grande.
Después de esos cuatro días, Judit y su amiga volvieron a Colorado pero sólo para coger fuerzas para su siguiente destino: New Orleans. Allí pasaron tres días y exploraron el French Quarter mientras se hospedaban gracias al sistema que la plataforma web www.airbnb.com ha creado. Hacer Airbnb durante vuestros viajes por Estados Unidos es una de las opciones más rentables ya que dormiréis por un precio bastante asequible en habitaciones/camas de gente local que ofrece su espacio a gente como vosotras. Cuando se acabó su viaje, su amiga se volvió a Maryland y Judit hacia Colorado otra vez. Este viaje lo planearon un par o tres semanas antes de marcharse así que, como podéis ver, no hace falta demasiada planificación para ir (en este caso) a Nueva Orleans y hospedarse en un Airbnb.
Sin embargo, lo bueno aún estaba por llegar. Judit tenía ya reservado con un par de meses de antelación EL VIAJE. El gran viaje. Recorrer la isla de Hawaii con otras au pairs; no suena nada mal, ¿verdad?
A decir verdad, hay muchísimas organizaciones americanas que se encargan de organizar viajes de este tipo, se aprovechan del gran flujo de au pairs que hay en el país y organizan suculentos viajes para que éstas disfruten de su mes número 13 rodeadas de chicas como ellas (aunque hay que destacar que normalmente estos viajes están también abiertos a cualquier persona que tenga entre 18 y 30 años siempre y cuando haya plazas disponibles). Sin embargo, como ya os decía, están normalmente dirigidos a au pairs, no hay más que ver el nombre de la organización con la que se marchó Judit: Au pair Adventures (en su página web podéis explorar un poquito más el resto de viajes que ofrecen: Florida, California, Ruta 66, etc. https://www.aupairadventures.com/). En la página web también podréis echarle un vistazo a los precios de los viajes y a los itinerarios (sí, para que se os vaya abriendo el apetito aventurero).
El tour en Hawaii duraba 7 días pero Judit llegó un día antes para empezar a explorar la zona por si sola. En el viaje había otras 18 au pairs (europeas en su mayoría) y dos jóvenes guías americanos y se conocieron todos un lunes por la mañana. A partir de ese momento, empezó la diversión: dar la vuelta a la Big Island en siete días a bordo de furgonetas en las que cabían 10 personas. Allí hicieron snorkelling, clift jumping, boogie boarding, visitaron cascadas en medio de la jungla, volcanes, conocieron las dos ciudades más importantes, probaron la comida típica de la isla, nadaron con tortugas… Vaya, lo que viene siendo ¡estar en el paraíso!
Judit recuerda esta experiencia como inolvidable ya no sólo por el hecho de estar en Hawaii sino por compartir la experiencia con gente de su edad que había vivido la misma experiencia que ella, pero a la vez, diferente. Eso sí, todas las que allí se encontraron tenían un sólo objetivo: ¡pasárselo en grande!